A la sombra de los pórticos - 1° tramo: Santa Caterina y Saragozza

Los pórticos arquitrabados de via Santa Caterina y los espaciosos de via Saragozza son un valioso testimonio histórico que trasciende los siglos y ha llegado hasta nosotros.

El primer tramo de la UNESCO que exploramos en Bolonia son los pórticos de via Santa Caterina y via Saragozza, que acompañan a los visitantes en un viaje entre la humildad y la espiritualidad

El pórtico de via Santa Caterina se construyó durante los siglos XIV y XV para proteger a los transeúntes del sol y la lluvia. También servía de refugio para los peregrinos que se dirigían a las iglesias cercanas. De hecho, esta calle, escondida entre las menos transitadas, fue durante siglos una ruta importante hacia los monasterios y las estructuras religiosas de la zona, como Santa Caterina di Strada Maggiore, de la que toma su nombre.

El pórtico de via Santa Caterina se caracteriza por un ambiente íntimo y acogedor, gracias a sus arcos rebajados y columnas de piedra alternadas con tramos de mampostería. Las bóvedas, sencillas y medievales, mantienen intacto el encanto original, revelando partes todavía de madera. Es frecuentado principalmente por residentes y estudiantes universitarios, que encuentran en esta calle una alternativa tranquila y alejada del bullicio de las zonas más céntricas.

Siguiendo en dirección sur, se llega a los pórticos más anchos y transitados de via Saragozza. Este tramo de pórtico, aún dentro de las murallas de la ciudad, obtuvo su aspecto actual entre 1861 y 1865, cuando el ayuntamiento ordenó la construcción de imponentes edificios destinados a viviendas para clases populares que, en la planta baja, mantuvieran el perfil porticado de la construcción preexistente.

El tramo finaliza en Porta Saragozza. Construida en el siglo XIII y dotada en 1334 de un puente levadizo, esta puerta adquirió gran importancia en 1674, cuando se construyó el pórtico más largo del mundo: un camino porticado que desde aquí serpentea hasta la cima de las colinas boloñesas, donde se encuentra el Santuario de la Madonna di San Luca.

Hoy en día, el pórtico de via Saragozza es un lugar dinámico, frecuentado no solo por quienes se dirigen al Santuario de San Luca, sino también por residentes, deportistas o amantes de los paseos.

“A la sombra de los pórticos” es la colección que explora los doce tramos de los pórticos de Bolonia, reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2021. Una colección que, además de ofrecer una visión de la historia y la arquitectura, también cuenta la vida cotidiana de quienes trabajan, transitan y viven bajo esos pórticos todos los días.